Comencé Octubre con un plan: me propuse ver la mayor cantidad de películas de miedo desde el día primero hasta el 31 de Octubre. Sabía que no lograría 31 películas, pero sí pensé que podría ver entre 15-20. Pregunté en mis redes por sugerencias. Algunos me contestaron con películas que ellos habían visto y otros con series, pero la gran mayoría me contestó con comentarios como “¿Pero por qué harías eso?” “No tengo ninguna sugerencia por que no veo películas de miedo” “¡Wow! ¡Qué valiente!”
Me llamó mucho la atención las respuestas. Pero no tanto la postura pues, como todos, conozco a gente que no le gusta ver películas de miedo. En particular, me acordé de una conversación que tuve con una amiga donde me decía que ella no ve nada que la vaya a alterar o preocupar. (En ese caso en particular hablábamos de Stranger Things, Tercer Temporada). Solamente ve cosas que le dan felicidad y la hacen pasar un rato agradable. Me pareció una postura muy sana y admirable. Firme en lo que a ella le hace bien.
Lo que sí me sorprendió fue la cantidad de personas que pensaban como mi amiga, que no veían películas de miedo ni les llamaba la atención.

Para mí, ver este tipo de películas era algo muy normal, desde pequeña las veía con mis papás. Me acuerdo en particular de una Semana Santa cuando mis papás nos presentaron con unas clásicas de miedo: Arachnophobia, The Birds de Alfred Hitchcock y, mí preferida, Wait Until Dark con Audrey Hepburn.
Apagamos todas las luces del cuarto de tele, servimos palomitas para todos y, juntos en el sillón, nos olvidamos del mundo y disfrutamos de las películas. Inclusive, me parece que las vimos más de una vez.

Durante esa misma época, recuerdo que cada que venían mis primas de visita durante el verano, adicional a jugar por las tardes en casa de mis abuelos, íbamos a Blockbuster a rentar dos películas: Witches e IT. No creo que teníamos edad apropiada para ver IT, pero por alguna razón la descubrimos y la veíamos sin parar.
Conforme crecí, deje de ver películas de miedo. Mi esposo no es fan y estas cosas a veces es más divertido ver en compañía. Sin embargo, recientemente he estado reviviendo mi curiosidad por ver un poco más de ellas.
El año pasado disfruté muchísimo cuando Netflix sacó la serie de The Haunting of Hill House. Me pareció excelente. Contenía la mezcla perfecta de misterio, sustos y suspenso. Y, cuando salió el remake de IT, fui con una amiga a verla. Estas experiencias despertaron en mi esa emoción que sentía de pequeña al ver películas de miedo. Por eso, este año quería seguir explorando este tipo de películas y decidí intentar mi propósito de Octubre: ver mínimo 15 películas de miedo.
Mi intento no tuvo éxito.
Empecé bien. Vi dos películas la primer semana de Octubre: Rebirth y The Babadook (ambas en Netflix). La primera me pareció buena ya que si el objetivo de una película de miedo es ocasionarte estrés durante el tiempo que la estás viendo, esta lo logró a la perfección. La segunda, The Babadook, me ocasionó mucho más estrés. A pesar de ser una historia totalmente de ficción, me dejó muy intranquila por días. No lograba animarme a poner otra. ¿Será que había perdido cayo?
Veía como avanzaban los días en el calendario y pensaba ¿cuándo me animaré a ver la próxima? Entonces me acordé de las personas que me habían cuestionado al iniciar este reto. ¿Por qué quiero seguir sufriendo? Ellos son felices sin agregarle estrés a su día. ¿Por qué no puedo hacer lo mismo?
Definitivo que tenían razón. Decidí dejar mi reto. No es que no me guste ver películas de miedo, sino que creo que lo que disfruto de ellas es verlas en familia. Con otros. Compartir la emoción y los sustos juntos. Así, es más divertido y no te sientes solo. Dejaré por ahora de ver películas de miedo sola, las dejaré para compartir con otros.
Y tú, ¿qué opinas de las películas de miedo?
PD. Agradezco a mis amigas y seguidores que cuestionaron mi decisión, los que admitieron que ellos no compartían el gusto por ver este tipo de películas. Gracias a ustedes logré pasar un Octubre con menos estrés. 🙂
De acuerdo! Ver con otros es mucho mas divertido. Yo vi Babadook con amigos y la disfrutamos mucho! No habia descifrado que ese es el secreto, nueva regla from now on!
LikeLike
Sí! Con amigos… y creo que afecta también la cantidad de veces… Ver cosas estresantes una noche tras otra, no te de oportunidad de recuperarte… Al final, se trata de disfrutar: disfrutar la movie, el miedo, los gritos. Nunca pasar un mal rato. 🙂
LikeLike