Septiembre, el otro Enero.

A principios del 2019 hice una lista inspirada por el podcast de Gretchen Rubin donde sugiere listar 19 cosas que quisieras hacer en el 2019, “19 for 2019“. Es un ejercicio similar al de hacer propósitos sin embargo, esta lista se conforma más bien de 19 tareas, objetivos o mini proyectos. Pretende ser menos ambiguo y más preciso en lo que se desea lograr.

Hace unas semanas, revisé mi lista para ver cómo iba. Y, para ser sinceros, no voy muy bien.

Les comparto mi lista para el 2019 y su porcentaje de avance.

1. Hacer albums de fotografías. (0%)
2. Tomar más fotos con personas (menos “do it for the gram” más “do it for the memory”) (20%)
3. Aprender 1 receta nueva al mes. (0%)
4. Leer libros de finanzas. (0%)
5. Leer 5 libros. (40%)
6. Preparar un presupuesto y llevar un registro de mis gastos. (50%)
7. Empezar un segundo negocio. (70%)
8. Comprar regalos de Navidad en Noviembre. (0%)
9. Colgar cuadros pendientes en las paredes. (0%)
10. Organizar documentos importantes de la casa. (y de la vida) (0%)
11. Hacer algo con las computadoras viejas que aún tenemos. (0%)
12. Revisar y sacar CDs viejos. (10%)
13. Decidir qué hacer con mis DVDs. (0%)
14. Minimizar mi closet. (compras inteligentes) (90%)
15. Vender mi vestido de novia o guardarlo correctamente. (0%)
16. Comprar abrigo negro para el invierno. (0%)
17. No brincarme los desayunos. (90%)
18. Correr un 10k. (0%)
19. Practicar/Mejorar mi letra. (10%)

Avance total: Aproximadamente 40%.

Aunque podríamos pensar que esto me desanime por el hecho de encontrarnos ya en el segundo semestre del año, a 3 meses de terminarlo, no es el caso. He decidido enfocarme en lo que sí he logrado y el tiempo que aún me queda para lograr algunas otras cositas que siguen pendientes.

Llevo un gran avance en temas que considero involucran mayor trabajo y dedicación y trascendencia. Algunos otros, como decidir que hacer con mis DVDs viejos, pueden no ser tan urgente y pueden esperar (un poco).

Viene Septiembre, y Septiembre es el otro Enero. ¿Por qué? Empieza un ciclo escolar nuevo y, por lo tanto, muchas clases y programas inician en estas fechas también: diplomados, clases de arte, círculos de lectura, talleres… hasta los gimnasios aprovechan y ponen promociones.

En el aire de Septiembre se respira algo similar al de Enero, ambos marcan nuevos comienzos.

Si eres una persona que se niega a hacer propósitos de año nuevo porque son demasiado cliché, Septiembre puede ser un buen momento para intentar algo nuevo. Y, si eres una persona que te gusta hacer tus propósitos desde Enero, voltea a ver a Septiembre como un empujón para agarrar un segundo aire. No se desanimen: Septiembre es un muy buen momento para comenzar.

Y recuerden: cualquier progreso es un buen progreso.

Y tu, ¿qué piensas de Septiembre? ¿Lo ves también como un nuevo comienzo?